Diario Electrónico de Mejillones

Fundado el 2 de noviembre del 2001

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Cultura

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La cultura en manos del Serplac

Wilfredo Santoro Cerda

A fines de abril quedó sepultada la posibilidad de rescatar la figura del “Chango” López y el patrimonio literario mejillonino. El proyecto de la Escuela Literaria “Azotacalles”  fue calificado como inadmisible por el Serplac, porque faltó un papel. Específicamente “Certificado Aporte  Tercero por el Editor $ 1.200.000”.

De esta forma el personaje más fascinante de la Segunda Región, el “Chango” López seguirá en la niebla del olvido. Igual suerte corrieron otros vecinos mejilloninos del siglo XIX, como el carismático barón De la Riviere y su compinche, José Díaz Gana, con quien una tarde de copas en La Caleta organizaron la caravana que descubrió el cerro de plata de Caracoles, tras partir desde esa misma zona de Mejillones.

También íbamos tras los pasos de Neftalí Agrella y su más misterioso primer libro ¿Savia Roja? ¿Savia Nueva? ¿1920? ¿1921?... bueno…Allí quedó “Poetas y pioneros”… Serplac decidió que faltaba un  papel, por lo que ni siquiera tuvo la posibilidad de ser considerado por el Core.

Con respecto al documento que generó el rechazo, no lo incluimos por una razón muy sencilla: el trabajo de edición lo iba a realizar yo, que era el responsable del proyecto… y yo ya había emitido una declaración jurada manifestando mi compromiso a realizar todas las acciones necesarias para concluir exitosamente el proyecto. A juicio nuestro ya había cumplido con esa condición. El costo de ese trabajo de edición: 1 millón 200 mil pesos, no iba a ser pagado con fondos fiscales sino era el aporte de mi institución… Yo no iba a percibir un peso.  

SISTEMA ESTÁ AL REVES

  El actual sistema para definir la inversión del 2 % del FNDR destinado a cultura se define por burocracia, no por calidad. Es patético que la viabilidad de un proyecto la determine el Serplac y no el Core.  ¿Para qué el pomposo nombre de “estrategia de política cultural” si el filtro será un funcionario que no considerará para nada el espíritu de dicho documento y se limitará a revisar si falta un timbre o un sobre?

Si efectivamente se buscara rescatar nuestro patrimonio cultural el proceso debiera ser al revés…. el Core decidiría cuales son los proyectos que se ajustan a su política cultural, priorizarlos y finalmente, consultar al Serplac ¿son viables estos proyectos? Según la respuesta de este ente técnico, el Core debiera abrir un segundo proceso, destinado a que los proyectos impugnados cumplieran con los requisitos que les impone el Serplac. De no poder cumplir tales condiciones, recién debieran declararse inviables.

El actual esquema en realidad deja al Core y su graciosa política cultural como letra muerta. El Serplac lleva la batuta y actúa con un criterio que no tiene relación con la política cultural propiamente tal, sino con sus propios parámetros e intereses. Cuando eso se les plantea a los consejeros regionales, ellos dan aquella respuesta con la que los políticos suelen justificar todo lo que son incapaces de arreglar “…es que el sistema es así…”

 

       "Poetas y Pîoneros"... el libro que no obtuvo financiamiento de fondos culturales el año 2009. Quedó relegado por otros proyectos, que sin tener trascendencia alguna estaban apoyados por personeros de la Concertación, que en ese entonces se hallaba en el poder. Durante los 20 años de la Concertación la Escuela Literaria "Azotacalles" de Mejillones no accedió a ningún proyecto, a pesar de una trayectoria de más de 30 años haciendo cultura.