Diario Electrónico de Mejillones

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Cultura

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Correos de Chile... cartas que nunca llegan

Wilfredo Santoro Cerda

"Una carta que nunca llega... una carta que jamás esperas.. cartero del amor... tráeme mi carta..." Corría la década del 70 y la pegajosa cumbia abordaba un tema que repentinamente reapareció para mí este siglo XXI... la poca seriedad de la empresa de Correos.

El lunes 17 de mayo –a través de Correos Chile- envié un sobre certificado de Mejillones a Correo Central, en Santiago, a objeto que su destinataria lo recibiera más rápido. Me dijeron que se demoraría a lo más 3 días hábiles, por lo que el jueves 20, a más tardar, estaría en manos de la persona. Hoy es 31 de mayo, han transcurrido dos semanas, y el sobre aún no llega.

El viernes 28 llamé a Correos. Hablé con una señorita llamada Carla Valenzuela. Ella me dijo que en verdad el plazo para que llegara una carta no era de tres sino de 8 días hábiles. Es decir, una carta certificada se puede demorar desde Antofagasta a Santiago 10 días y eso es perfectamente normal. Ahora, me señaló que la única forma de apurar la causa era realizar un reclamo, para lo cual Correos de nuevo disponía de 8 días hábiles, a fin de realizar una investigación. En otras palabras, Correos se puede demorar perfectamente 24 días sin que una carta llegue a destinatario y durante ese tiempo está autofacultado para no dar explicaciones.

Le manifesté a la señorita Valenzuela que yo no quería realizar reclamo alguno ni activar ninguna investigación, solamente que alguna persona de Correos me dijera donde el destinario podía ir a retirar la carta. Me dijo que eso era imposible. Le pedí algún número de teléfono para que alguien hiciera la consulta y me señaló que la única forma era hacer el reclamo y ponerse a esperar los 10 días.

Antes de continuar debo señalar que la señorita Valenzuela fue la persona más atenta que me atendió. Previamente hubo dos que ante mis consultas simplemente me decían “espere un poquito” colocaban una musiquita y me dejaban allí en una espera eterna.

Bueno, lo que yo había enviado eran documentos. Necesitaba realizar una gestión, por lo que otra vez tuve que ponerme a sacar los papeles respectivos, para hacer nuevamente el envío, ya que nadie puede esperar 20 días por una carta. Esta vez mandé los papeles por Chileexpress. Es segunda vez que me pasa. El año 2004 envié un libro y la encomienda simplemente se perdió, a pesar que pagué como 5 mil pesos, por el servicio más seguro. La única respuesta que me dio Correos es que se había “extraviado” y ni siquiera me devolvieron el importe que pagué.

A que lamentable estado ha llegado una compañía que en el pasado fue un sello de confianza.